lunes, 20 de febrero de 2012

MALVINAS UNA HERIDA ABIERTA III

El día después
Las pensiones a los ex-combatientes de Malvinas sólo se establecieron en 1990, casi una década después de la guerra y gracias a la ley nacional 23.848, que beneficiaba a los ex soldados conscriptos, comenzaron a cobrar 150 pesos mensuales.

La difícil recuperación de las secuelas de la guerra y de la reinserción social, el "Trastorno de Estrés Postraumático" (TEP) afectó en diverso grado a todos los ex combatientes. El TEP es un estado depresivo crónico, propio de alguien que ha experimentado de forma directa la guerra. Genera una constante sensación de temor, angustia u horror y pesadillas, miedos, problemas de relación, irritabilidad, dificultades para conciliar el sueño, sobresalto, un elevado nivel de violencia e irritabilidad, inclinación por las adicciones, entre tantos síntomas.

Según datos estadísticos obtenidos en el 2004 por el Ministerio de salud de la provincia de Buenos Aires (5), un 77.9% de los ex combatientes sufre de trastornos de sueño. Un 10% reconoce haber padecido síntomas psicóticos tales como delirios, alucinaciones y manifestaciones paranoicas. Un 20% asegura sufrir algún tipo de fobia y un 60% se queja de trastornos de la memoria (olvido constante de nombres, fechas, situaciones, etc.). Un 32% declara padecer de ideas obsesivas ligadas a Malvinas y la relación de Malvinas con hechos posteriores. Un 28% de los ex combatientes encuestados tiene ideas recurrentes respecto al suicidio; un 10 % reconoce que ha realizado intentos de suicidio en una o más ocasiones. El 37% se reconoce violento; un 26% usa comúnmente armas de fuego.



Informe Rattenbach - Recortes de prensa. Un fragmento sustancial del Informe Rattenbach, considerado secreto de Estado por la dictadura militar, fue publicado por la revista Siete Días, lo que trajo aparejado una encendida discusión sobre la libertad de prensa. Clic para descargar los recortes en formato imagen.

Los estudios (6) ayudan a entender las particularidades de la población de ex combatientes: el 41% alcanzó la escolaridad primaria; el 60% no tiene resuelta en forma estable su situación laboral; el 36% padece discapacidad física y/o psíquica. Si bien el 99% cuenta con obra social, el 72% no concurre al médico y el 91% no recibe atención específicamente psiquiátrica y psicológica. El 88% nunca concurrió a un centro de salud. Entre el 25 y el 39% de los ex combatientes (varía según su zona de residencia), padece el TEPT.

Las formas más frecuentes de TEPT en estos ciudadanos son: trastornos depresivos severos con intentos de suicidio o idea suicida persistente; violencia familiar; bajo o nulo control de los impulsos; intoxicación por drogas o alcohol; abstinencias; episodios de descompensación psicótica, trastornos de ansiedad en sus distintas formas. La fantasía suicida, los intentos concretos de suicidio, o bien las conductas de autodestrucción y auto agresión se verifican en casi todos los casos de urgencia. Al margen del altísimo número de suicidios consumados, hay un número de casos de "suicidio encubierto" (sobredosis, accidentes, etc.), de los que no se tiene un registro claro.

En los últimos años la situación de los ex combatientes de Malvinas mejoró notablemente. Los Centros de de ex combatientes (organizaciones creadas por los propios soldados, unas 30 ONG en todo el país), han logrado acceder a la participación en la discusión de políticas públicas con el Estado, con objeto de revertir la situación. 26 años después de terminada la guerra, recién ahora se está realizando un relevamiento socio-sanitario nacional de los ex combatientes, para atender aquellos casos de alta vulnerabilidad, a cargo del INSSJP-PAMI, obra social que atiende a los ex combatieres y a su grupo familiar.

Con el incremento de las pensiones, la situación económica de los ex combatientes ha mejorado. A partir del 2004, el estado nacional otorga una pensión de 1.700 pesos, equivalente a tres jubilaciones mínimas y en muchos casos los estados provinciales también otorgan pensiones y coberturas en las obras sociales provinciales. A partir de enero de 2007, la provincia de Buenos Aires, que tiene el 50 % del padrón –unos 5.500 ex soldados-, otorga una pensión equivalente a tres salarios mínimos del estado provincial, unos 1.500 pesos. En la provincias de Corrientes, Chaco, Entre Ríos, Ushuaia, entre otras, la situación es similar.

Cacería de patos
Durante la guerra de Malvinas, el general Galtieri le comentó muy convencido al mediador Alexander Haig "Nosotros tenemos experiencia en guerras porque hemos combatido a la subversión" Y el norteamericano le contestó irónicamente: "Ustedes tuvieron una cacería de patos, guerra es lo que van a tener ahora".

También existen encuadres para el acceso al trabajo. En la provincia de Buenos Aires, los ex soldados tienen prioridad para ocupar cargos auxiliares (porteros) en la Dirección General de Escuelas, donde trabajan 1.000 ex combatientes. Así mismo, en el 2007 el ANSES (Administración Nacional de la Seguridad Social) reconoció un error en la liquidación de los haberes de las pensiones devengadas en años anteriores, estimado en 30.000pesos por ex combatiente.

Durante 10 años no hubo ningún tipo de asistencia ni ayuda, por lo que se reclama una ley de reconocimiento histórico por el periodo que abraca desde 1982 hasta 1990.

Los militares fueron a Malvinas cobrando salario y con cobertura social, en tanto que los conscriptos se encontraban cumpliendo con la Ley de servicio militar obligatorio, derogado en 1994.

* Edgardo Esteban: Escritor, periodista, ex combatiente en la guerra de Malvinas entre Argentina y Gran Bretaña (1982). Autor del libro "Iluminados por el Fuego", y coautor del guión de la película del mismo nombre.
Prof GB

No hay comentarios:

Publicar un comentario