El ministro de Economía, Axel Kicillof, respondió a los empresarios del coloquio de la Unión Industrial de Córdoba, que se quejaron por el atraso cambiario. Kicillof los llamó "Club de los Devaluadores" y les pidió que "no mientan más con el atraso cambiario del 35% porque joden a la gente".
El ministro explicó en una entrevista con el Canal A24 que "cuando la gente se asusta, no invierte. Si era mentira eso por lo que se asustó, capaz no invierte igual. La inversión es muy volátil. Si la gente piensa que va a haber devaluación, atraso cambiario, no invierte".
En la misma sintonía, el presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, llevó un manto de calma y aclaró  en Radio América que "a pesar de todo este clima que se ha querido instalar en esta semana, los plazos fijos como total y en particular los minoristas han subido mucho, más de un 40 por ciento".
Los expertos coinciden en que a la gran mayoría de la sociedad no le conviene la incertidumbre, y por lo tanto, tampoco la volatilidad o las actitudes especulativas. Para aquellos que apuestan a tener un trabajo, o a montar una pequeña empresa, la incertidumbre los fuerza a tomar decisiones que luego terminan perjudicándolos. En este sentido, Kicillof criticó a quienes intentaron instaurar un clima de pánico: "el año pasado decían que iba a haber despidos, liquidar todas las reservas, que el dólar se iba a disparar. Como la cotización oficial no se mueve, las reservas crecen, tenemos reservas para pagar deuda, aparece esta cuestión que está desmedida, que es la cuestión del dólar ilegal", sostuvo el ministro.
En declaraciones al canal de noticias C5N, el titular del Palacio de Hacienda consideró que "hay empresarios bienintencionados y malintencionados. En 2014, criticaron el atraso cambiario y después del corrimiento del tipo de cambio dijeron que estaba todo mal". Y enseguida acotó: " La verdad, es que las devaluaciones son recesivas e inflacionarias".
Por ello, el objetivo del gobierno es mantener la estabilidad económica.
"Transmitimos tranquilidad, no pasa nada en la Argentina que requiera un cambio drástico", declaró Kicillof, y acto seguido agregó también que "nosotros identificamos la crisis mundial desde el año pasado, y por eso hicimos un montón de programas para sostener la demanda interna, como el Pro.Cre.Ar, el Progresar, Ahora 12 y Precios Cuidados, para que la dificultades económicas de los otros países no afecten el nivel de empleo en la Argentina".
En efecto, la caída de los precios internacionales de las commodities y la peor situación en Brasil reducen las perspectivas de crecimiento y la posibilidad de colocar la producción en el mercado, por lo que, si el Estado no se hace presente sosteniendo la demanda, y los privados sobreactúan posponiendo el consumo y la inversión, un mal clima internacional puede ser el preludio de una crisis infringidas por quienes apuntan a un ajuste.
Para desestimar ese panorama pesimista, Vanoli destacó el fomento al ahorro en pesos, que luego se transforma en fondeo en los bancos para el crédito a la inversión y el consumo. "Lo importante es esto que en economía se llama alineación de intereses. Si las tasas para ahorristas son atractivas con mecanismos que impidan que suban las tasas de interés para los créditos, entonces esto tiene un doble efecto positivo, es bueno para los inversores, pero fundamentalmente es bueno para la economía en su conjunto porque moviliza los recursos hacia la economía real", detallo Vanoli.
Según el titular del Banco Central, "alineamiento de intereses" son las palabras que definen el programa económico del gobierno. Reducir la incertidumbre cambiaria y fortalecer el ahorro en pesos, para impulsar el consumo y la inversión a través de distintas iniciativas. Esto permitiría crecer sin llegar a una devaluación. Sin embargo,  algunos grupos pareciera que no están interesados en este resultado.
"¿A quién beneficia esto?", se preguntó Vanoli en referencia a la especulación con el dólar ilegal y el tipo de cambio, para luego responder que "beneficia a algunos sectores que la están propiciando".
El presidente del Banco Central denunció luego que "hay sectores de la oposición que están tratando de instalar miedos, instalar que viene más crisis. Es una combinación de intereses mediáticos, de intereses políticos y de intereses de sectores concentrados, que quieren que los argentinos no voten tranquilamente, que se vote en otras condiciones".
Aunque Kicillof reconoció que en la Argentina "la gente piensa en dólares", consideró que "va a hacer falta muchos años para convencerla de que vuelva a hacerlo en pesos", por lo que se cuestionó : “¿Vamos a dejar que la gente vaya corriendo en estampida y se lleve los dólares? Tiene que haber un proceso".
En este sentido, Vanoli consideró que ésta es una lucha "contra 40 años de historia argentina, para no ir más atrás, el Rodrigazo, hasta bueno, la crisis de Martínez de Hoz, el plan Bonex y el 2001."  Tanto Kicillof como Vanoli destacaron que el Banco Central tiene las reservas suficientes para pagar unos U$S6200 millones del Boden 2015. "Tenemos las reservas, tenemos todos los instrumentos financieros y de supervisión para acotar la volatilidad financiera, para evitar cualquier tipo de maniobra, con lo cual garantizamos absolutamente que los argentinos van a poder votar en paz", precisó Vanoli. Distintas consultoras y especialistas reconocen que existe una recuperación del consumo y la actividad económica. Kicillof opinó que "este año que hay claras, innegables señales de recuperación, por lo que ahora ya no pueden crear este clima, así que hablan de una crisis que va a estallar en el próximo año. Si sigue nuestra fuerza política, no se va todo al bombo". «


La inversión pública, clave
El gasto en seguridad social consolidado del gobierno para 2014 será de $ 440.090 millones, un 33% del total de los gastos del Estado, un 8,95% del Producto Bruto Interno, según el presupuesto publicado en el Boletín Oficial. Este rubro del gasto tendrá un aumento interanual del 29 por ciento. Por otro lado, se prevé un incremento de $ 42.412 millones de las transferencias corrientes a privados, provincias y municipios, por lo que el gasto total por este rubro será de $ 348.727 millones, un 25,9% de la totalidad de las erogaciones. Esto incluye "los aumentos en las Asignaciones Familiares, las coberturas sociales del PAMI y las transferencias dirigidas al sistema de transporte automotor y al ferroviario."
Además de la inversión social, la inversión real directa será de $ 80.225 millones, un 6% del gasto total, y un incremento interanual del 12,5 por ciento. El 70% estará destinada a la provisión de servicios económicos, en especial los rubros de Transporte, Energía, Combustibles y Minería, mientras que el 22,9% estará destinada a los servicios sociales, en particular a la provisión de Agua y Alcantarillado y en Educación, Cultura y Ciencia y Técnica.