lunes, 9 de julio de 2012

PATRIA





La Patria está vivita y coleando
Por Francisco José Pestanha *

“La Patria es un peligro que florece.
Niña y tentada por su hermoso viento,
necesario es vestirla con metales de guerra
y calzarla de acero para el baile
del laurel y la muerte”.


Leopoldo Marechal

Ciertas afirmaciones suelen esconder prejuicios inconfesables y, aunque se pretenda disimularlos, a veces emergen de los textos con prístina nitidez. Tal es el caso de la columna aparecida en Clarín el 24 de junio de 2012 bajo el título “Moyano, Cristina, Vandor y Perón” donde la periodista Susana Viau - entre otras consideraciones relacionadas con el conflicto entre el gobierno nacional y el titular de la central sindical - sostuvo que Gabriel Mariotto “… portavoz del comité de crisis, batía récords oratorios con la palabra “patria”. A ella, a “la patria” regresaba de apuro la Presidente; el conflicto de los transportistas de combustibles le ocasionaba “un gran dolor de cabeza a la patria. La patria de Mariotto tiene jaquecas, viaja en ómnibus, conduce automóviles, se ducha y cocina: no es un concepto, es un ser vivo. El pensamiento del vicegobernador, además de nacional y popular, es organicista”.

Aunque probablemente desconocida por el gran público a quien obviamente no pretende dirigirse Viau, la referencia con aires despectivos al “organicismo” que profesaría el vicegobernador, no hace más que remitirnos a una dicotomía que cruza el desarrollo histórico del pensamiento político y social, y sobre la cual, bien valdría formular alguna reflexión, aunque tal labor le hubiere correspondido a la ilustrada periodista.

El debate sobre la naturaleza de las sociedades data de antiguo, y entre otras tantas controversias despierta particular atención la disputa establecida entre organicistas e individualistas.

Los primeros en términos generales, conciben a las sociedades (cerradas) como verdaderos organismos, y a los pueblos, como unidades. Así para las versiones mas representativas de esta corriente el conjunto se encuentra por sobre el individuo. Según autores como Norberto Bobbio, Platón y Aristóteles ya planteaban versiones organicistas de la sociedad acuñando particularmente este último razonamiento: “….el todo es anterior a la parte”.

Durante el período medieval predominaran en Europa las versiones orgánicas, y durante la modernidad y la postmodernidad, tanto en Europa como en América surgirán nuevas posturas organicistas inclusive desde positivismo filosófico.

Para los segundos, los individualistas, siempre prima el sujeto, lo individual sobre lo colectivo, el individuo sobre el conjunto, siendo este último, “producto de una actitud voluntaria” de cada una de las partes (Bobbio dixit). Surgirá así el contractualismo, doctrina que se expandió a la vera del desarrollo capitalista y en especial a partir de la concepción del homo economicus, individuo que persigue su propio interés por sobre todas las cosas. El autor citado precedentemente considera a Thomas Hobbes como el padre intelectual del individualismo.

Hechas estas compendiadas referencias, nada extraña que tanto Mariotto como Marechal, en el encabezado del presente texto, hayan hecho referencia en su prédica a formas simbólicas de corporización de la Patria, ya que sus posiciones presuponen una cosmovisión filosófica y epistemológica que, mal le pese a Viau, surgió desde la particularidad mestiza de nuestra Iberoamérica para intentar superar las limitaciones impuestas por un individualismo agobiante.

Debe recodársele a la periodista que a comienzos del siglo XX comenzaron a desarrollarse en nuestro subcontinente fecundas corrientes filosóficas que han aportado originales categorías al pensamiento social, y que además, nutrieron conceptualmente al movimiento político que encabezara el tres veces presidente de los argentinos Juan Domingo Perón. El justicialismo como doctrina pero también como filosofía, se enraíza en una larga tradición de la filosofía como tal, y del pensamiento americano en especial.

Debe mencionársele, además, que Mariotto reconoce pertenecer al movimiento político cultural que filosóficamente cuestionó al individualismo y al liberalismo clásico, oponiéndole nociones como la de la libertad situacional, una concepción verdaderamente comunitaria de dicho valor. Para el justicialismo, la libertad del individuo presupone anteriormente la libertad del conjunto. No hay sujetos verdaderamente libres en una comunidad que no lo es. Perón sostenía que resulta dificultoso para un individuo realizarse en ambiente adverso, inhóspito y subyugado. Tal idea fue materializada por el conductor del justicialismo en una sentencia que resume su pensamiento “es muy difícil que un hombre pueda realizarse en una comunidad que no se realiza.”

Viau, de haber actuado con honestidad periodística, debería haber señalado que el organicismo que presupone el simbolismo discursivo de Mariotto no resulta similar al organicismo biologista concebido en el viejo continente, sino que procede de la imbricación entre filosofía y acción que en nuestra América proviene del carácter esencial de mestizaje. Reconocidos filósofos como Armando Poratti sostienen, en ese sentido, que América no permite, pues, un lugar claro desde el que se la pueda “contemplar”, esto es, hacer “teoría” sobre ella. Se la entiende en la acción que al mismo tiempo la va creando, en el trato con los elementos y conflictos profundos que la constituyen. En ese orden de ideas, la reconocida y respetable posición filosófica sustentada por el peronismo es en ese sentido, orgullosamente organicista, humanista y democrática y por ello no reconoce liderazgos sino conducciones porque no se puede conducir lo inorgánico.

La Patria en su acepción clásica, suele referir a la tierra natal o adoptiva a la que un individuo se siente ligado por vínculos de diversa índole. Pero también nos remite a un fenómeno socio-histórico-cultural colectivo.

En los países periféricos la prioridad por la emancipación requiere de concepciones cohesivas no oprimentes que contribuyan a encauzar las aspiraciones colectivas respetando las individuales. De la incomprensión de éste fenómeno, o de la ignorancia respecto a las alternativas que los argentinos hemos ensayado durante nuestro devenir común en busca de nuestra liberación material y cultural, tal vez provenga el prejuicio de la periodista.

Concluyo este breve texto con una poesía de Julia Prilutzky Farny, poetisa que compartiera largas jornadas de ilusiones y esperanzas con Eva Perón. Julia, no cabe duda, profesaría aún hoy un gustoso organicismo.


LA PATRIA

"Se nace en cualquier parte.
Es el misterio - es el primer misterio inapelable-,
pero se ama una tierra como propia
y se quiere volver a sus entrañas.

Allí donde partir es imposible,
donde permanecer es necesario,
donde el barro es más fuerte
que el deseo de seguir caminando,
donde las manos caen bruscamente
y estar arrodillado es el descanso,
donde se mira al cielo con soberbia
desesperada y áspera,
donde nunca se está del todo solo,
donde cualquier umbral es la morada.
Donde se quiere arar. Y dar un hijo.
Y se quiere morir, está la Patria."

Julio 2012

* Profesor Titular del Seminario Introducción a Pensamiento Nacional en la Universidad Nacional de Lanús, y miembro de numero Instituto Nacional de Revisionismo Histórico Argentino e Iberoamericano Manuel Dorrego.

miércoles, 4 de julio de 2012

La cena con Alchouron que generó expectativa

04/07/12
Tal vez porque no hay peor gestión que la que no se hace y creía tener el no asegurado, Guillermo “Willy” Alchouron le propuso a Hugo Moyano ser el orador del encuentro mensual de Consenso Republicano. El ex presidente de la Sociedad Rural y luego legislador en nombre de la fuerza que supo liderar Domingo Cavallo, se sorprendió por la rápida respuesta del jefe de la CGT. La comida es mañana jueves a las 21.
Cuando Alchouron lo comentó entre los legisladores que integran ese espacio que une a radicales, conservadores, seguidores actuales y pasados de Lilita Carrió, menemistas y duhaldistas; se encontró con un aluvión de pedidos para poder participar. Así las cosas, el habitual Club del Progreso les quedó chico y lo concretarán en el más amplio Centro de Ingenieros.
Un dato: por primera vez pidieron custodia del lugar a la Policía Metropolitana de Mauricio Macri. El otro: limitaron el número de preguntas.
Muchos de los asistentes estuvieron en las antípodas de Moyano por los bloqueos a las plantas fabriles y por su papel durante el largo conflicto con el campo, cuando el camionero se enfrentó a los cortes de ruta. Pero ahora pidieron estar lo más cerca posible de la mesa principal.
Símbolo de estos nuevos tiempos y de la irrupción de Moyano como figura de la oposición, desde Patricia Bullrich a Hilde Chiche Duhalde serán de la partida. Eduardo Menem también reservó lugar lo mismo que la radical Silvana Guidice. Y hay hasta lista de espera entre los analistas políticos. El primero en anotarse fue Rosendo Fraga.

FUENTE CLARIN.COM

PD Después algunos dicen que la Historia no sirve; para qué hurgar, recordar, investigar.
Comparar con tiempos idos?, para qué?.
Y no porque la Historia se repita, de ningún modo, pero, personajes, grupos de poder, corporaciones, intereses contrarios a los sectores populares siempre los hubo, los habrá.
Ponerlos en contexto, y buscar sus raíces nos sirve para seguir atentos a los nuevos entramados que puedan surgir
A la nueva Alianza, o Unión Democrática que se construya, y a los siempre idiotas útiles que traición mediante hacen de carne de cañón.
GB

martes, 3 de julio de 2012

EL INICIO DE LA DEUDA EXTERNA ARGENTINA.

La Baring Brothers y la historia de una deuda
Por Fernando Del Corro

Los procesos independentistas de las colonias españolas en América rápidamente devinieron en Estados endeudados con instituciones financieras británicas. El 1 de julio de 1824 la Provincia de Buenos Aires firmó el famoso empréstito de la Baring Brothers a partir del cual la Argentina inició su derrotero como gran deudora, la que hizo decir a Domingo Faustino Sarmiento, unas décadas más tarde, “Calle Esparta su virtud, /sus hazañas calle Roma, / ¡silencio!, que al mundo asoma/la gran deudora del Sud.”

Un acuerdo espurio hizo que la provincia, y a la larga la Nación, asumieran un enorme costo decidido por sólo unos pocos que manejaban sus negocios desde la hoy Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Política arbitraria que, implícitamente porque estaba dirigida a las deudas de las autoridades coloniales, rechazó muy poco después Antonio José de Sucre cuando el 9 de diciembre de ese mismo 1824, derrotara en los Campos de la Quinua, Ayacucho, a las tropas españolas encabezadas por el francés José de Canterac.

En el artículo octavo del Tratado de Ayacucho quedó establecido el principio de la ilegitimidad de las deudas contraídas sin el consentimiento de los pueblos. Después de que los Estados Unidos derrotaran a España en 1898 –tras lo cual se generó la “independencia” de Cuba y Filipinas, Puerto Rico, y otros enclaves coloniales pasaran de manos de la vencida al vencedor–, el criterio que adoptó el presidente William McKinley, de los Estados Unidos de América, para no reconocer las deudas de esas colonias, fue el de Sucre, y lo llamó “deuda odiosa”.

Ya en 1820 la Gran Colombia había comenzado a endeudarse para afrontar los gastos de guerra.

En 1822 ya debía dos millones de libras y en 1824, casi en simultáneo con Buenos Aires, recibió 4,75 millones más. Los británicos facilitaban préstamos para desarrollar “Estados modernos” mientras penetraban con sus mercaderías y recolonizaban comercial y financieramente a esos países. Lo mismo pasó con el Perú y con otras nuevas naciones. Así América Latina llegó a tener el 46,6% del total de las deudas estatales del planeta, por 20.329 millones de libras, distribuido de esta manera: Colombia 6,75 millones, 15,5%; México 6,4 millones, 14,7%; Brasil 3,2 millones, 7,3%; Perú 1,816 millones, 4,2%; Chile 1 millón, 2,3%; Argentina 1 millón, 2,3%; y América Central 0,163 millones, 0,4%. En ese entonces la Gran Colombia incluía a los actuales Estados de Colombia, Ecuador, Panamá y Venezuela; México tenía un territorio un poco mayor al doble del actual dado que su zona norte, el 55%, le fue arrebatada por los EEUU en una guerra iniciada en 1846; y Centroamérica agrupaba a los hoy El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua.

La “modernización” impulsada desde Londres hizo que la Junta de Representantes bonaerense autorizara al Ejecutivo provincial a gestionar una deuda de hasta cuatro millones de pesos. La norma, votada el 19 de agosto de 1822, durante la gobernación de Martín Rodríguez, siendo hombre fuerte su ministro Bernardino de la Trinidad González Rivadavia y Rivadavia, tenía propósitos preestablecidos que no se cumplieron; el préstamo se concretó pero el dinero se malgastó de cualquier otra manera. Los objetivos incumplidos eran la construcción del puerto de la Ciudad de Buenos Aires, la instalación del servicio de agua corriente para la misma y la creación de tres ciudades sobre la costa provincial del Océano Atlántico y de varios pueblos en la zona de la frontera con los pueblos originarios.

Esa legislatura también había aceptado tomar el dinero a un tipo del 70%, es decir recibir 700.000 por cada millón de deuda. Rivadavia organizó un grupo negociador en nombre del gobierno provincial. Lo constituyeron los locales Félix Castro, Braulio Costa, Miguel Riglos y Juan Pablo Sáenz Valiente, y los hermanos escoceses John y William Parish Robertson. Varios de ellos tienen calles en la hoy CABA, escuelas y hasta ciudades que llevan su nombre en distintos lugares del país. Este consorcio recibió un poder especial que les permitió concretar la contratación del préstamo. En ese momento Rivadavia había cesado en sus funciones por no llevarse bien con el nuevo gobernador Juan de Las Heras. Pero todo seguía su marcha. Cabe consignar que la propuesta inicial de Rivadavia había sido mucho más inconveniente pero fue moderada ante la firme oposición de Julián Segundo de Agüero en la Junta.

El negocio fue excelente para los consorcistas. Consiguieron un millón de libras esterlinas colocado en el mercado al 85%, pero como estaban autorizados a hacerlo al 70% se repartieron el 12% entre ellos y el 3% para la Baring Brothers & Co. Los intereses debían pagarse semestralmente con una comisión para la Baring del 1%, además de otra comisión igual por toda la operatoria con los títulos que podía, llegado el caso, subir al 1,5%, en tanto que Buenos Aires puso como garantía todos sus recursos incluyendo la hipoteca de la tierra pública. Pero el dinero, salvo una pequeña cantidad, no llegó nunca, sino letras sobre comercios, uno de los cuales era propiedad de Costas y los Robertson, siendo también beneficiada la firma británica Hullet Brothers con la que poco después Rivadavia realizó un negocio minero en La Rioja. Otro beneficiado con una letra fue Manuel de Sarratea, quien como miembro del Primer Triunvirato traicionó a José Gervasio de Artigas pretendiendo ceder la Banda Oriental a España. Entre el poco metálico y las letras llegaron al país, según los cálculos cambiarios, entre 550.000 y 570.000 libras. No es extraño ya que del total de la deuda antes mencionada para América Latina sólo se recibieron 7 millones, poco más del 30% del total.

El ministro de Hacienda, Manuel José García, el mismo que negociara luego la paz con el Brasil que incluyó la independencia buscada por el Reino Unido de la Banda Oriental, guerra en la que se terminara de gastar el empréstito, inventó mil y una alternativas sobre qué hacer con los fondos, siempre apelando a negociados financieros con sus amigos, como Costas y los Robertson. Entre otros, los títulos de la Baring sirvieron para avalar la emisión de bonos locales en moneda local con pingües comisiones siempre para los mismos. Así, el endeudamiento público argentino siguió creciendo con diferentes gobiernos, y hasta hubo algún default, como el de Juan Manuel de Rosas ante la agresión anglo-francesa, hasta estallar la crisis de 1890, cuando la Baring estuvo a punto de quebrar y fue salvada por los gobiernos de Francia, el Reino Unido y Rusia, que resolvió –con graves costos para la Argentina– el problema de la City londinense. El Arreglo Romero de 1893, que puso en caja a los acreedores, posibilitó la salida y así, en 1904, 80 años después, se pudo cancelar un pasivo por el que se había pagado varias veces la suma efectivamente percibida.

02/07/12 Tiempo Argentino

lunes, 2 de julio de 2012

Carpani todavía..


“Carpani todavía…”
Inauguran una muestra sobre la obra de Ricardo Carpani
El día de la inauguración (martes 3 de julio a las 19:00) el secretario de Cultura de la Nación, Jorge Coscia, el historiador Norberto Galasso, el escritor Eduardo Jozami y Marcelo Duhalde –hermano del difunto Secretario de Derechos Humanos de la Nación- disertarán sobre la obra escrita del artista: La política en el arte, Arte y militancia y Arte y Revolución en América Latina.

La exposición se desarrollará del 3 de julio al 31 de agosto. Podrá visitarse de martes a domingos de 11:00 a 19:00 en Lafinur 2988. 
Museo Evita inaugura “Carpani todavía”, una muestra que incluye cuadros, dibujos y esculturas del artista argentino Ricardo Carpani. Además, se exhibirán fotos de su archivo personal y afiches.

“Nada de lo humano me fue ajeno”, decía Carpani, por eso su obra está íntimamente ligada a los conflictos sociales que atravesó el país. Y, de esa forma, sus trabajos dialogan y reflexionan sobre la historia argentina.

Las criaturas salidas de su mano poseen una tensión muscular que refleja su esencia, pero a la vez los perfiles de todos los cuerpos logran sujetar finalmente esa gran rabia interior o pasión a punto de desbordarse. La variedad de técnicas utilizadas en el manejo del blanco y negro: el grafito, la tinta, la línea, las texturas, la fuerza de los trazos, no constituyen únicamente la expresión visual que el artista tiene del mundo, sino un verdadero acto de fe y de afirmación de sus ideales.

Carpani es un auténtico caso de concordancia entre convicciones y obras: ganado por la causa de la lucha obrera, se convirtió en el creador de toda una iconografía laboral compuesta de carteles colmados de héroes sindicales, de murales con semidioses musculosos que reclamaban justicia social. Esa inspiración ha sido el fundamento moral y estético de su vida.

Al contemplar a estos héroes obreros armados sólo con la ira o la humillación, el inconsciente colectivo entabla con ellos una relación de complicidad. El resultado es una mixtura de ironía, placer y sarcasmo.

Carpani todavía…”, que se exhibirá hasta el 31 de agosto, incluye cuadros como “Quienes somos de donde venimos y a donde vamos”, Eva Perón y Tiempos difíciles, entre otros. Además, se exhibirán los retratos que el artista realizó de reconocidas figuras del periodismo argentino como Rodolfo Walsh, Scalabrini Ortiz y Roberto Arlt.

Por otra parte, minutos antes de la inauguración de la muestra, Jorge Coscia, secretario de Cultura de la Nación, el historiador Norberto Galasso, el escritor Eduardo Jozami y Marcelo Duhalde –hermano del difunto Secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde – hablarán sobre la obra escrita de Carpani, la cual se condensó en tres libros: “Arte y Revolución en América Latina” (1961), “La política en el arte” (1962) y “Arte y militancia” (1975).

La lectura de estas obras resulta hoy indispensable no sólo para rastrear el marco teórico-ideológico de su fecunda producción plástica, o para reflexionar en torno a la conflictiva relación entre arte y política, sino para entender una década, la del 60, en muchos aspectos fundante de una transformación intelectual y cultural en toda América Latina, con el despertar explosivo de procesos y posturas revolucionarias que marcarán como matriz la impronta de la subsiguiente década del 70.

Ricardo Carpani
Nació en 1930, en Tigre, provincia de Buenos Aires.

A los 22 años de edad comienza su formación artística con el maestro Emilio Pettoruti.

En 1959, participa de la fundación del “Movimiento Espartaco”. Luego realiza murales en varios sindicatos, y afiches para la CGT.

Publica Arte y revolución en América latina (1961) y La política en el arte (1962). Participa en múltiples muestras y exposiciones, tanto individuales como colectivas, en Argentina, Europa y Latinoamérica. En 1968, comienza a colaborar con la CGT de los Argentinos. En 1974, viaja a Europa para realizar varias exposiciones. En 1975, en Madrid, publica Arte y militancia. A raíz del golpe cívico-militar de 1976, inicia su exilio en España, que durará diez años. En 1984, regresa a la Argentina. Continua su obra, realizando grandes murales a lo largo del país, y un gran retrato del Che Guevara, que actualmente está en la Plaza de la Cooperación, en Rosario.

Murió en Buenos Aires el 9 de septiembre de 1997

GOLPE EN PARAGUAY? NO ELIASCHEV, NO CLARIN, NO, QUE VA.

El día del cese, legisladores negociaban instalar una base militar
Destitución de Lugo, maniobra política de Estados Unidos

Por Stella Calloni
La Jornada

Mientras se realizaba el juicio político exprés contra el presidente democráticamente electo de Paraguay, Fernando Lugo, el pasado 22 de junio, considerado "ilegal" por los países vecinos, diputados paraguayos se reunían con militares de Estados Unidos para negociar la instalación de una base castrense en el Chaco, territorio extenso y despoblado del país sudamericano.

El legislador José López Chávez, quien respondía al grupo disidente del Partido Colorado (la Unace) –encabezado por el general golpista Lino Oviedo, con el cual tiene algunas diferencias– y es presidente de la Comisión de Defensa de la cámara baja, expresó su "esperanza" en que Estados Unidos instale bases militares en el Chaco, según fuentes de ABC Color (www.abccolor.com.py).

De acuerdo con ese medio, el más poderoso complejo mediático de la derecha en Paraguay y clave en la destitución de Lugo, el diputado López Chávez –acusado de conductas mafiosas– confirmó que dialogó con jefes militares estadunidenses sobre la posibilidad de instalar bases, aunque el tema está siendo analizado por el Pentágono

En declaraciones a una radiodifusora paraguaya (789 AM), el legislador argumentó que "es necesario" instalar dichas bases, ya que, según su apreciación, Bolivia "constituye una amenaza para Paraguay, debido a la carrera armamentista que desarrolla". Asimismo alega que su país necesita mejorar su seguridad en las zonas despobladas.

La "ayuda humanitaria"

El posible acuerdo bilateral llevaría "ayuda humanitaria de tropas estadunidenses" para la población local. Como se sabe, la "acción cívica" y la "ayuda humanitaria", que ya han realizado tropas de Estados Unidos en Paraguay, a las que se dio inmunidad diplomática en mayo de 2005, es un esquema de contrainsurgencia, espionaje y control poblacional y territorial.

Según las fuentes, esa propuesta tomó estado público el pasado 23 de junio, "luego de un encuentro entre referentes de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados con un grupo de generales de Estados Unidos, el cual llegó al país para dialogar sobre eventuales acuerdos de cooperación".

Esta podría ser una de las causas de la rapidez con que se sacó a Lugo del gobierno, por los compromisos con el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión de Naciones Sudamericanas, lo que no habría permitido avanzar en el proceso de bases castrenses.

En 2009 Lugo había rechazado, aunque débilmente, la posibilidad de grandes maniobras del Comando Sur en Paraguay, aduciendo los compromisos con naciones asociadas.

Pero desde mayo de 2005 –antes de la llegada de Lugo al gobierno– se permitió el ingreso de tropas estadunidenses a Paraguay con inmunidad, permiso de libre tránsito y permanencia para sus soldados con vigencia hasta diciembre de 2006, prorrogable automáticamente, como entonces publicó este periódico.

Fue uno de los golpes más fuertes que Washington asestó contra el Mercosur, el cual renunció así a su poder jurisdiccional, ya que las tropas pueden trasegar armamento, equipo y medicamentos y actuar en cualquier lugar del territorio, y sin nuevas autorizaciones en esos momentos entraron un contingente de 400 soldados –el primero– y grupos especiales.

En realidad, este tipo de tropas nunca se fueron de Paraguay. Cuando el dictador Alfredo Stroessner fue derrocado por un golpe "entre amigos" en febrero de 1989 se mantuvieron en el poder militares que habían participado en su larga dictadura (1954-1989).

Paraguay perdió el derecho de investigar los delitos que pudieran cometer las tropas extranjeras y no podrá demandar a Washington ante la Corte Penal Internacional, violando así su legislación.

En Paraguay, informes detallados de analistas militares advirtieron sobre la poderosa infraestructura de Estados Unidos en un país de importancia geoestratégica, porque limita con Bolivia, Brasil, Argentina y está relativamente cerca de otros donde hay bases castrenses estadunidenses.

Los militares del Comando Sur han marcado el territorio que está sobre el extenso acuífero guaraní, uno de los más grandes de agua potable del mundo, ubicado en la triple frontera que tiene Paraguay con Argentina y Brasil.

Según los informes castrenses, todos los cuarteles paraguayos cercanos a las fronteras están preparados como infraestructura para tropas estadunidenses, las cuales incluso han cavado pozos artesianos para agua potable, supuestamente para campesinos, que en realidad éstos no utilizan.

Así, el cuartel Mariscal Estigarribia, situado a sólo 250 kilómetros de Bolivia, tiene una pista de casi 3 mil 800 metros de largo, en un país que tiene escasas fuerzas aéreas.

Ésta fue construida por tropas estadunidenses, las cuales la modernizaron en años recientes y está diseñada para recibir aviones Galaxy y B-52, así como otras aeronaves portadoras de equipo y armamento de gran escala; también está preparada la pista de la base de Palmerola, en Honduras.

De la misma manera, allí pueden ubicarse miles de soldados si se requiere hacerlo en cualquier momento. Está catalogada como una de las bases con infraestructura más poderosa de Estados Unidos en América Latina.

Sin embargo, es evidente que ante la ofensiva en marcha contra los gobiernos de Sudamérica que posibilitaron un escenario golpista en Bolivia y Paraguay, en junio de este año, así como conatos desestabilizadores en Argentina, se necesita ubicar más tropas en ese lugar estratégico.

La noticia de los acuerdos mencionados entre los diputados ligados con la dictadura pasada y los generales estadunidenses no sorprende en estas circunstancias. Y precisamente en un país donde la lucha por las tierras robadas y mal habidas, como las caracterizó la Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia, el conflicto social es cuestión permanente.

Para los campesinos, recuperar sus tierras es cuestión de vida o muerte. Especialmente por los ataques de los llamados "brasiguayos" y sus grupos de choque, empresarios soyeros de Brasil, pero como sostiene Martín Almada, defensor de los derechos humanos, forman parte de las grandes corporaciones, como Monsanto, que avanzan sobre el continente.

Detrás de la destitución de Lugo hay elementos que deben verse como un ataque estratégico para el proyecto de desestabilización, tendiente a golpear la integración latinoamericana.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2012/07/01/mundo/025n1mun

1 de julio de 1974

Millones lloraron, otros tantos festejaron, propios y extraños, pensaron que con el Viejo ido, todo sería mas fácil.
La revolución socialista, el exterminio definitivo del peronismo, la apropiación del aún movimiento de masas mas grande de América Latina.
Pero los millones que lloraron, supieron esperar y aquí están hoy.
En medio de otras encrucijadas, otras Américas y otros liderazgos.
Con la aparición de violencias sociales inesperadas, raras, que, por momentos reaparecen y tiñen todo el esfuerzo del trabajo, la inclusión, la solidaridad, la conducción de un proyecto nacional de cara a un mundo neoliberal y explosivo.

Millones huérfanos ayer, liderados hoy, buscan no sin complejidad la continuidad histórica del hilo que comenzó a tejer Juan con su Pueblo cuando asumió como Secretario de Tarbajo y Previsión.
Es el Peronismo, que siempre está llegando, siempre está volviendo.

gb

Ayer y hoy en Sudamérica, el mismo enemigo.Los mismos Pueblos libertarios.

Vargas, Arbenz y Perón
Por Eduardo Anguita
eanguita@miradasalsur.com

Tras haber gobernado durante 15 años seguidos, entre 1930 y 1945, Getulio Vargas fue reelecto para la presidencia de Brasil en 1951. Si algo no le faltaba era experiencia en la gestión y confianza en el pueblo; sin embargo, Vargas, el 24 de agosto de 1954, en su oficina, se pegó un tiro en el corazón. Los grupos golpistas habían empezado la campaña desestabilizadora unas semanas antes. El testamento del Padre de los Pobres no deja lugar a dudas. Empieza y termina de un modo que tiene vigencia en estas horas de América latina: “…No me acusan, me insultan; no me combaten, difaman de mí; y no me dan el derecho a defenderme. Necesitan apagar mi voz e impedir mi acción, para que no continúe defendiendo, como siempre defendí, al pueblo y principalmente a los humildes. Sigo lo que el destino me ha impuesto. Después de décadas de dominio y privación de los grupos económicos y financieros internacionales, me hicieron jefe de una revolución que gané. Comencé el trabajo de liberación e instauré el régimen de libertad social (…) Luché contra la privaciones en el Brasil. Luché con el pecho abierto. El odio, las infamias, la calumnia no abatirán mi ánimo. Les daré mi vida. Ahora les ofrezco mi muerte. Nada de temor. Serenamente doy el primer paso al camino de la eternidad y salir de la vida para entrar en la historia”.

Dos meses antes, la CIA y un grupo de militares locales desalojaban a Jacobo Arbenz de la presidencia de Guatemala. Había asumido democráticamente tres años antes. Su discurso inaugural era un desafío a la United Fruit y a otras multinacionales La operación de la CIA se basó en que la Casa Blanca consideró inadmisible que Arbenz ordenara revisar la contabilidad de la United Fruit para la evaluación de las tierras que le expropiaría en función de la reforma agraria en marcha en ese país. Cuando lo rodearon las tropas, Arbenz salió del Palacio de Gobierno con las manos en alto y en un trámite exprés lo mandaron al aeropuerto para fletarlo a México, no sin antes hacerlo desnudar ante las cámaras de la televisión norteamericana. Las imágenes fueron cuidadosamente editadas para no perturbar a los corazones protestantes de los millones de seguidores de la doctrina Monroe.

Juan Domingo Perón, desde el principio de su presidencia en 1946, vislumbraba la necesidad de un sur americano unido. Tomó el llamado Plan ABC (Argentina, Brasil, Chile), que originalmente fue diseñado por José María da Silva Paranhos Junior, el Barón de Río Branco, fundador de la política exterior del Brasil y creador del moderno Itamaraty. El plan era de principios del siglo XX, cuando no faltaban rumores de guerra entre Brasil y Argentina, siempre alimentados por los intereses de las oligarquías locales y de Estados Unidos y Gran Bretaña.

La idea de acercar Brasil a la Argentina pesaba mucho en la estrategia de Perón porque Vargas, pese a ser un líder popular, cuidaba celosamente la relación con Estados Unidos: era parte de la política del Estado de la aristocracia paulista. El 21 de septiembre de 1951, durante un agasajo ofrecido al embajador del Brasil, Perón quiso que le llegaran los elogios a Vargas: “Nosotros, los argentinos, compartimos el profundo pensar de este ilustre brasileño, al decir que la Argentina y Brasil, en esta hora incierta de la humanidad, unidos nos salvaremos; nos salvaremos de cualquier acechanza del destino o de cualquier mala situación que pueda venir en los tiempos venideros”. Una semana después, Perón conjuraba el primer levantamiento golpista, liderado por el general Benjamín Menéndez. No estaba claro si los conspiradores contaban con apoyo explícito de intereses transnacionales, pero estaba claro que eran una herramienta de la oligarquía que veía con desesperación que el comercio exterior estuviera nacionalizado y que el precio del trigo y la carne fuera fijado para terminar las rentas extraordinarias de ese sector privilegiado, acostumbrado a ejercer el poder en la Argentina.

Perón insistió con su idea del ABC. Sus palabras más directas al respecto las pronunció el 11 de noviembre de 1953, en la Escuela Nacional de Guerra, cuando la situación económica empezaba a mostrar el agotamiento del modelo de sustitución de importaciones sin alianzas externas y el clima político ponía en evidencia que los sectores medios eran la base de cualquier aventura antidemocrática. Esas palabras de Perón se dieron a conocer muchos años después, en 1967, cuando el General estaba en el exilio en Madrid. Tienen una vigencia extraordinaria y algunos párrafos son reveladores de cómo los líderes populares siempre supieron la importancia estratégica de esta región del planeta.


 Perón se refiere a los dilemas que enfrentaría el planeta: “Resulta también indiscutible que la lucha fundamental en un mundo superpoblado es por una cosa siempre primordial para la humanidad: la comida. Ese es el peor y el más difícil problema a resolver (…) De la fortaleza de Sudamérica en términos de sus recursos naturales y su capacidad de producción de alimentos nacen también sus riesgos mayores: los países superpoblados y superindustrializados que no disponen de alimentos ni de materia prima (…) podrían emplearlo para despojarnos de los elementos de que nosotros disponemos en demasía con relación a nuestra población y a nuestras necesidades”.

Perón consideró que Argentina debía tomar la iniciativa para sumar a sus vecinos al proyecto de integración económica: junto a Brasil y Chile “conforman quizás en el momento actual la unidad económica más extraordinaria del mundo entero, sobre todo para el futuro, porque toda esa inmensa disponibilidad constituye su reserva”. Perón había logrado consensuar con el presidente chileno Carlos Ibáñez, pero la poderosa diplomacia de Brasil se oponía. “Itamaraty –sede de la Cancillería– ha soñado, desde la época de su Emperador hasta nuestro días, con una política que se ha prolongado a través de todos los hombres que han ocupado ese difícil cargo en el Brasil.

Ella los había llevado a establecer un arco entre Chile y el Brasil: esa política debe ser vencida con el tiempo y por un buen proceder de parte nuestra”. Según varios historiadores revisionistas, entre ellos el uruguayo Alberto Methol Ferré, en la desestabilización de Vargas y su suicidio, la alianza con la Argentina era un factor decisivo. La oligarquía brasileña no estaba dispuesta a semejante paso. Lo sucedido en la Argentina es conocido: menos de un año después de que estallara el corazón de Vargas, las bombas de los marinos argentinos hacían estragos en la Plaza de Mayo en una húmeda y neblinosa mañana porteña. El asesinato masivo de personas al boleo era el prólogo del golpe de septiembre de 1955. Fue la manera de avisar que estaban dispuestos a matar no a un par de centenares de ciudadanos que deambulaban por las calles sino a los que fueran necesarios. Digamos, por poner una cifra, a 30.000.

Estas páginas de la historia parecen estar presentes en el eco de la reciente resolución de Mendoza: Brasil y la Argentina se acercan de la mano de sus estadistas, Cristina Fernández de Kirchner, Dilma Rousseff, con la participación del gran oriental José Mujica. Los conspiradores que empezaron por Paraguay saben que Dilma y Pepe conocieron las torturas y las cárceles diseñadas en la Escuela de las Américas.


 Saben que Cristina es implacable en la lucha contra la impunidad de los genocidas. La jugada más contundente que tomaron este viernes en Mendoza es un reto a que nunca más se repitan las historias de pisotear la hermandad latinoamericana: la invitación a Venezuela para ser parte de una alianza poderosa del Sur que mire al Sur.

01/07/12 Miradas al Sur